En el póquer oímos hablar a menudo de conflictos entre el hombre y la máquina, y luego entre el jugador y la inteligencia artificial. Ahora no podía faltar el desafío entre el jugador de póquer Paul Watson y el ChatGPT, un modelo avanzado de lenguaje de inteligencia artificial. Sí, está prohibido en Italia.
Empecemos por el resultado de la partida: Watson ganó 117 euros en una partida del exclusivo evento Club 52, organizado por la empresa tecnológica de Bermudas Cactus.
Un portavoz del evento declaró: “Aunque el modelo de IA demostró entender el juego, perdió 117 euros contra su oponente de la vida real. A pesar del resultado, el evento demostró el potencial de la inteligencia artificial en escenarios complejos y del mundo real”.
El cofundador de Cactus, James Robinson, quien organizó el evento, declaró a Royal Gazzette: “Sin ningún tipo de entrenamiento conseguimos que el ordenador entendiera qué cartas se repartían y que estaba jugando al póquer. Hasta ahora hemos conseguido que me diga a mí, como persona, que me retire, pase, iguale, haga rake e incluso que vaya all-in. Con más preparación, la próxima vez podremos utilizar el GPT-4 durante toda la sesión, así que no creo que Paul lo tenga tan fácil”.
No mucho, pero en este punto el hombre ganó: “Fue un honor participar, agradezco que James pensara que yo podía ser un digno oponente para el ordenador. Jugar contra un oponente de IA como ChatGPT, fue una experiencia única y emocionante. Espero con impaciencia nuestra revancha en mayo”.
Por desgracia, al cabo de una hora, el ChatGPT empezó a reiterar constantemente que como IA no puede jugar al póquer, y se puso en huelga. Habría que entender la reticencia, que, de ser cierta, haría al ChatGPT mucho más justo que los jugadores que ya sueñan con unirse a la mesa de cash game, para secar algunas ballenas con su apoyo.
Parece darse cuenta de que ChatGpt en casa puede ser utilizado serenamente al margen de otro PC o teléfono móvil y tomar información de él.
Habrá que ver qué información obtiene y cuándo está completa; aunque el póquer siga siendo un juego incompleto, y habrá que entender si uno puede seguir teniendo ese pensamiento y esa jugada que le pueden servir para vencer a cualquier cosa, máquina u oponente.
La empresa está planeando un segundo desafío, previsto para mayo, y pretende seguir demostrando las capacidades de ChatGPT y sus posibles aplicaciones en distintos sectores.